Como en cada carrera, Extreme E colaborará con organizaciones que protegen el medio ambiente en los lugares por los que pasa la competición. En esta ocasión, retomará los proyectos de carbono verde y azul que puso en marcha junto a MEDSEA Foundation en la primera temporada.

Los pilotos visitarán los olivares que plantaron el año pasado en Sennariolo, una de las zonas afectadas por los incendios forestales de 2021, y llevarán a cabo campañas de prevención en las comunidades locales.

Además, participarán en un proyecto de conservación y relleno de pastos marinos, capaces de producir 100.000 litros de oxígeno por hectárea y de capturar un 30% más de carbono que los bosques tropicales. Sin embargo, son uno de los ecosistemas más castigados por el cambio climático.